jueves, 24 de diciembre de 2015


VISITANDO QOSQO ETERNO
                           

Todo cuanto conocemos del imperio de los Incas llego a nosotros por los cronistas que fueron registrando sus impresiones de cuanto vieron u oyeron sobre esa cultura colosal y sobre su gran capital.
El cronista Pedro Sancho, compara los edificios del Qosqo con las obras de los romanos, las murallas de Tarragona, el acueducto de Segovia y aún con los trabajo de hércules. Miguel de Este lo compara con burgos; y Cieza de León, el príncipe de los cronistas, afirma: “En ninguna parte de este reino del Perú se halló forma de ciudad de tan noble ornamento… El Qosqo tuvo gran manera y calidad, debió ser fundada por gente de gran ser”
Sobre los palacios y muros incaicos, los españoles fueron edificando sus iglesias y sus propias morada, dando una nueva fisonomía a la ciudad. Amalgamaron la arquitectura logrando un mestizaje que da al Qosqo un sabor especial.
Por eso los viajeros coloniales y republicanos encontraron un nuevo Qosqo con casonas blasonadas y patios solariegos. Entre quienes lo describen figura el arqueólogo norteamericano Efraín George Squier, quien afirma: “El Qosqo fue la ciudad más grande de toda América, solo se la puede comparar con las pirámides, con el Stone Longe y con el Coliseo”. El viajero alemán Schmidt la califica como “la más fantástica ciudad prehistórica que en el mundo exista” 

                                               El alma del Qosqo
Algo existe en el Qosqo que genera al mismo tiempo un sentimiento de respeto, de admiración, de orgullo de y contenida furia que de pronto quisiera desbordarse. Se percibe un halo de misterio y se siente por doquier el peso de la historia. Cada piedra testimonia un pasado grandioso.
Sobre las piedras bien ladradas vinieron los muros coloniales como queriendo representar objetivamente la unión de dos culturas.
Los numerosos restos arqueológicos Incas y pre incas existentes en el Qosqo no se circunscriben a la ciudad propiamente dicha, los alrededores y las provincias vecinas guardan restos de indudable importancia. Citaremos algunos de ellas.

Sacsayhuaman
Nada causo tanta admiración entre los cronistas como la fortaleza de Sacsayhuaman por el tamaño colosal de sus piedras, por su reciedumbre y por su disposición estratégica. Realmente es tan impresionante que explica la creencia que fue hecha por demonios u otros seres pero no por hombres. Los primeros españoles la desbarataron en parte. Cieza de León advierte entonces: “Lo que de esta fortaleza y la de Guarco ha quedado, sería justo mandar conservar para memoria de la grandeza de esta tierra…”
Esta admirable fortaleza atribuida al Inca Yupanqui y a escasa distancia de la gran ciudad es, a nuestro entender, la más cabal expresión de la potencia creadora del pueblo Incaico.

El Qoricancha, Templo del Sol
Fue el santuario más importante que existió en el Tahuantinsuyo.
En este lugar el oro y la plata tachonaban las paredes, a lo que debe su nombre y donde estuvo el gran disco de oro que la historia dice correspondió en el reparto al conquistador Leguízamo, quien lo perdió en una noche jugando a los dados.
Sobre él se levanta la iglesia de Santo Domingo que aún conserva en la parte externa del altar mayor el renombrado muro curvo de perfección asombrosa, así como los comportamientos interiores de admirable utilización de la piedra y que estuvieron dedicado a la luna, al rayo, etc.

Pisac
Es un complejo arquitectónico coronad por una ciudadela y un terrón astronómico destinado a observar los movimientos del Sol.
Una escalinata y un pórtico dan paso a un torreón circular formado por salas amplias y paredes excelentes en las que destaca un peñón tallado con una columna de piedra que determinaba el curso del sol. Es el famoso sol Intihuatana. Lugar “donde se marra al sol”. Los muros están perfectamente ensamblados y en las faldas del cerro existe una perfecta andenería con muros de contención admirablemente distribuidos.

Ollantaytambo
Es una fortaleza militar que domina el Valle Sagrado fundada por el general rebelde Ollanta, cacique de la región, que se sublevó contra el inca Pachacutec. Forma parte de una zona arqueológica amplísima a orillas del Vilcanota. Consta de terrazas simétricamente escalonadas y empinadas escaleras que conducen a la cúspide con sus descomunales monolitos del templo solar. Lo curioso es que en la zona no existe cantera alguna, por lo que el material pétreo debió ser traído desde Cachiccata, ubicada a considerable distancia y al otro lado del rio.
Machu Picchu
Constituye uno de los más famosos restos arqueológicos del mundo y pertenece a la humanidad. Simplemente, es un complejo increíble pues no se explica como en la cuna del cerro, en una topografía agreste y casi inaccesible, los antiguos peruanos pudieron construir una ciudad de piedra.
Fue explorada por Hiram Bingham en 1911 y hoy constituye el más poderoso atractivo turístico y la mejor carta de presentación del Perú en cualquier parte del mundo.


Las iglesias del Qosqo
La presencia de España en América no podría explicarse si n el ingrediente insustituible de la religión. No hay pueblo en el Perú, por pequeño que sea, que no gire alrededor de una iglesia.

Iglesia del Triunfo

Está situada en la Plaza de Armas, junto a la catedral e interconectada con ella. Se levanta en el lugar que se celebró la primera misa en el Qosqo y donde estuvieron sitiados los españoles cuando el cerco hecho por Manco II. En su altar esta entronizada la “Cruz de la Conquista” que, según  la tradición y la historia, portaba fray Vicente Valverde al llegar al Qosqo y, por tanto, la primera que entro en la ciudad imperial.

La Merced
Esta iglesia destaca por su gran custodia, maravilla de orfebrería que por sí sola justifica un viaje al Qosqo. Mide 1.30 m. de alto, es de oro macizo con 22.200 kg. de peso, tiene 617 perlas, una de ellas en formas de sirena: 1.518 diamantes, entre ellos 8 negros; esmeraldas, rubíes y topacios. Se conserva junto a otras obras artísticas de gran valor.

La Compañía de Jesús
Se levanta sobre los restos del Amaru Cancha, el gran palacio del Inca Huayna Capac, en plena Plaza de Armas. Es uno de los templos más bellos del Qosqo, cuya portada de piedra primorosamente labrada remata en dos macizas torres con ventanas tipo “Ojo de Buey”. Conserva hermosas obras de arte; tiene capillas subterráneas rodeadas de laberintos y comunicaciones secretas donde reposan los restos de ilustres personajes del pasado.

La Catedral

Soberbio templo que enmarca la Plaza de Armas, la antigua Huacaypata, cuya construcción se inició en 1560. La planta tiene forma de cruz latina, compuesta por 3 naces, 14 columnas rematadas por 21 arcos de medio punto con otras tantas bóvedas y diez capillas. En una de sus hermosas torres esta la famosa campana María Angola, la más grande del Perú y posiblemente de América, cuyos tañidos se escuchan a 40 kilómetros de distancia. El Altar Mayor, de un solo cuerpo con columnas dóricas, esta íntegramente cubierto con láminas de planta. Es una capilla de la nave derecha se venera al Señor de los Temblores. Patrón jurado del Qosqo cuyo altar esta guarnecido con plata. La efigie fue enviada por el rey Carlos V tiene un color oscuro que se atribuye al humo de los cirios que permanentemente existen a sus pies.
En la sacristía se encuentra la galería de los obispos del Qosqo: Conserva joyas invalorables como la gran custodia de oro macizo que pesa 26.670 kilos, mide 1.20 m. de alto con incrustaciones de piedra preciosas y en un altar, bien protegido, existe un lienzo de Jesús Crucificado, atribuido a Van Dyck.

Templo  De San Blas
Templo ubicado en el barrio Incaico del Thoqo- Kachi y, pese a su sencillez y menores dimensiones frente a otros templos, es uno de los más visitados porque guardada en su interior una de las más hermosas joyas de América: el famoso púlpito tallado de San Blas. La talla es simplemente admirable e inigualable, pues es de una sola pieza.
Otra joya que se conserva en un Cristo que tiene el cuello articulado para que al ser operado por una cuerda secreta, mueva la cabeza al ser interrogado respecto de los pecados de los indios.

Santo Domingo
Se levanta sobre los restos del famoso Qoricancha. El muro curvo del templo sirve a la sacristía y es la admiración de propios y extraños. Debajo del altar empieza una galería subterránea que, se dice, comunicaría con Sacsayhuaman.
Otros templos que dan al Qosqo esa fisonomía de ciudad colonial, son: San Francisco, con su coro de magistral talla; San Pedro; San Cristóbal, que domina la ciudad desde lo alta junto a las ruinas de Cocampata, residencia de Manco Capac; Santa Clara; San Antonio Abad, Belén, primer convento de mujeres mestizas; Almudena, Santa Catalina, La Recoleta, Santa Ana y Santiago.

Casas Coloniales

Las casonas constituyen, junto con los templos, hermosa expresión del Qosqo colonial. Algunas lucen todavía los escudos heráldicos de piedra, sus zaguanes y patios empedrados enmarcados por arcos y columnas.
Entre las casonas, destacan: El Palacio del almirante convertido en museo, la Casa de los Cuatro Bustos, actualmente hotel Libertador, la casa donde nació Garcilaso de la Vega, Casa Cabrera, de los Marqueses de San Juan de Buena Vista y Rocafuerte, de los Condes de Peralta, la Casa Concha, el local del antiguo Seminario, preparado  para que Entur Perú opere un hotel de cinco estrellas.
La Casa de Cartagena, la de los Maldonados; la del Márquez del Valle Umbroso y la de Leguízamon (o Leguízamo) que perteneció al conquistador Mancio Sierra de Leguízamon, quien jugo a los dados y perdió el disco de oro del Qoricancha.

                                Qosqo hoy

Qosqo es consciente de su poder de convocatoria y está preparado para recibir al visitante con buenos hoteles y servicios, que puedan y deben mejorar. El turismo es su principal y casi única fuente de recurso.
En los últimos años ha mejorado sustancialmente su fisonomía urbana bajo la conducción de su actual alcalde, Daniel Estrada Pérez. Se han mejorado calles y avenidas e instalado “Phaqchas” de aguas cantarinas que se precipitan en torrentes o delicadamente y que contrastadas con luces, constituyen en un regalo para la vista.
Nada mejor que ir y recorrer sus calles detenidas en el tiempo. Con toda seguridad se quedaran extasiados con la fiesta del Inti Raymi en la explanada de Sacsayhuaman, evocando la grandeza inca cada 24 de junio. Se familiarizaran con los bailes tan hermosos como el Carnaval de Tinta, alarde de colorida vestimenta. Disfrutaran de su comida típica donde campean el choclo de Urubamba, los chicharrones de San Jerónimo, el adobo de chancho, el capchi (chupe) de setas, rocoto relleno, pachamanca, choclo con queso y su mate de coca.
Qosqo seguirá convocando así a gente de todo el mundo, porque Qosqo no sólo pertenece a los cusqueños, si no al Perú y al mundo entero. Por eso la necesidad de conocerlo y recorrerlo. Los peruanos nos sentiremos más peruanos y los extranjeros nos conocerán mejor y aprenderán a querernos.

PARA MAYOR INFORMACION PUEDE VISITAR NUESTRA WEB:
www.machupicchuperutours.com
Email. machupicchuperutours@hotmail.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario